Este viernes, 22 de febrero, se celebró en el Centro Sociocultural de Paradela, la Cata de Calificación de la cosecha 2018 en la D.O. Ribeira Sacra, con el objetivo de establecer una valoración media de esta última cosecha.
El panel de cata valoró 10 referencias, representativas de las 5 subzonas (Amandi, Chantada, Quiroga- Bibei, Ribeiras do Miño y Ribeiras do Sil), catando muestras de pequeñas y grandes bodegas, y muestras de depósito y ya en mercado, para tener un abanico diverso, con el objetivo de determinar una calidad media de los vinos, que resultó ser EXCELENTE, con una puntuación de 8.1.
Integraban el panel de cata:
Antonio Raluy, miembro de la Asociación Gallega de Catadores
Mateo Seoane Corral, miembro de la Asociación Sumilleres de Gallaecia
Jesús Rodríguez Carreiras, miembro de la Asociación Vitislucus, Expertos en Análisis Sensorial y Enoturismo y Profesor de Servicios en Restauración en la Escuela de Hostelería de Lugo “IES Sanxiallo”
Argimiro Levoso Touceda, miembro de la Asociación Galega de Enólogos
Alfonso Losada Quiroga, experto en Análisis Sensorial de Vinos
Francisco Javier Rodríguez Medela, miembro del panel de cata del C.R.D.O.R.S.
José María Martínez Alonso, miembro del panel de cata del C.R.D.O.R.S.
José María Martínez Matos, miembro del panel de cata del C.R.D.O.R.S.
Juan Angel Martínez, miembro del panel de cata del C.R.D.O.R.S.
Xesús Verao Pérez, miembro del panel de cata del C.R.D.O.R.S.
Antonio Raluy, de la Asociación Gallega de Catadores, destacaba, “Son vinos sorprendentes, en el sentido que notabas una estructura y un frescor, a estas alturas del año, muy interesantes. Da la impresión de que nos va a llevar a una añada para disfrutar. Esa frescura nos adelanta un año esperanzador.”
Alfonso Losada, del panel de cata del C.R.D.O.R.S. apuntaba, “Fue un año en el que hubo enfermedades criptogámicas del viñedo, pero la conecha que se conservó, maduró muy bien en las últimas etapas y hace que demos esta puntuación de EXCELENTE”.
Mateo Seoane Corral, de la Asociación Sumilleres de Gallaecia, señalaba, “Se aprecia la variedad, el frescor, el potencial que tiene la Denominación de Origen. Una calidad, que si nos remontamos a hace 10 años, se ve que la evolución es muy positiva. Todos los vinos de Ribeira Sacra tienen esa fruta y esa frescura propia de los suelos donde nacen, la orografía, la climatología… Son vinos que no están pasados de grado alcohólico, tienen esa punta de acidez que los diferencia del resto de vinos del panorama nacional.”
Xesús Verao Pérez, del panel de cata del C.R.D.O.R.S. destacaba “Son vinos, que a estas alturas del año están muy equilibrados, con un tanino al que se le ve maduración y en nariz se les ve frescura, agradables, en la línea que está la Denominación, últimamente.”
El Consello Regulador organiza esta cata con el fin de informar a los consumidores sobre la calidad de los vinos que se van a encontrar en el mercado. La primera cata de calificación se celebró en el 1996, con el resultado de “BUENA”. Desde entonces, todas las calificaciones fueron de “MUY BUENA”, a excepción del 2000, el año pasado y éste, que fueron “EXCELENTES”.